Cuando se comienza a enviar correos electrónicos desde un dominio nuevo —o que no tuvo actividad en mucho tiempo, o nunca hizo envíos masivos — , es común enfrentar restricciones por parte de proveedores como Gmail, Outlook o Yahoo. Estos proveedores aplican filtros automáticos para proteger a sus usuarios del spam y pueden limitar temporalmente la entrega si detectan comportamientos sospechosos.
Si estás comenzando a enviar desde un dominio nuevo o inactivo, el proceso debe ser gradual y controlado. Con una buena configuración y prácticas responsables, vas a poder construir una reputación sólida que garantice alta entregabilidad en el mediano plazo. Y con DataCrush, contás con una plataforma que monitorea estos escenarios para ayudarte a alcanzar los mejores resultados posibles.
¿Qué puede pasar?
En los primeros envíos, es posible que algunos correos se demoren más en entregarse o incluso se rechacen temporalmente. Esto ocurre porque los proveedores necesitan verificar que el dominio sea confiable.
¿Qué hace DataCrush en estos casos?
Cuando se detectan señales de advertencia en los envíos por parte de los proveedores de email, como Gmail, Hotmail, Yahoo, etc, DataCrush aplica controles automáticos para proteger la reputación del dominio y asegurar la máxima entregabilidad posible. Esto puede implicar:
-
Retrasar temporalmente el envío para evitar bloqueos mayores.
-
Reducir automáticamente el volumen de salida si se detectan límites desde proveedores como Gmail u Outlook.
Este comportamiento es intencional y busca proteger tu dominio y asegurar que los correos lleguen correctamente a lo largo del tiempo.
Recomendación previa a cualquier envío masivo
Antes de realizar un envío de gran volumen desde un dominio nuevo o inactivo, se recomienda:
-
Contar con un plan de calentamiento de dominio, que defina cómo escalar progresivamente el volumen de envíos durante las primeras semanas.
-
Consultar con el equipo de soporte de DataCrush para validar si el dominio está listo para enviar.
-
Enviar primero campañas de prueba a contactos internos o altamente comprometidos.
-
Evitar usar plantillas nuevas sin testeo, ya que ciertos elementos pueden activar filtros anti-spam.
Claves para un calentamiento más rápido sin penalizaciones
-
No enviar de golpe a 10.000 contactos sin historial.
-
Evitar contactos antiguos o dudosos en las primeras semanas.
-
Dividir campañas grandes por hora o por lote.
-
Monitorear rebotes, aperturas y quejas diariamente.
Semana 1
Comenzá enviando entre 500 y 1.000 correos por día, segmentados a contactos que hayan interactuado recientemente con tu marca (clientes, usuarios frecuentes o leads activos). Evitá listas frías o antiguas en esta etapa.
Semana 2
Aumentá el volumen a entre 2.000 y 5.000 emails diarios, distribuidos en distintos horarios o campañas separadas. Es fundamental seguir monitoreando las tasas de apertura, rebote y quejas. Si se mantienen dentro de rangos saludables, podés seguir escalando.
Semana 3
Podés incrementar a 10.000 a 20.000 correos por día, incluyendo segmentos más amplios de tu base. Es clave seguir priorizando la calidad: contactos válidos, con consentimiento y cierta actividad reciente.
Semana 4 en adelante
Si la reputación se mantiene estable y los proveedores no muestran alertas, podés avanzar hacia el volumen completo planificado. Aún así, se recomienda dividir las campañas por segmentos y evitar picos muy bruscos en un solo envío.
Resumen general
Si vas a enviar emails desde un dominio nuevo o inactivo, es fundamental:
-
Configurar correctamente SPF, DKIM y DMARC.
-
Evitar enviar grandes volúmenes de inmediato. Aplicá un plan de calentamiento progresivo.
-
Priorizar contactos activos y con historial reciente.
-
Monitorear aperturas, rebotes y reputación desde el primer envío.
-
Consultar con el soporte de DataCrush para validar el estado del dominio y recibir asistencia en el proceso.
Un calentamiento bien hecho protege tu reputación y mejora la entregabilidad a largo plazo.
Comentarios
0 comentarios
Inicie sesión para dejar un comentario.